lunes, 26 de mayo de 2014

PROMESA DEL CIELO


Como una promesa anunciada
desvelada desde el cielo
encarnando el amor de la nada
en la entrega de amores terrenos.
Refuerzan el sello de la Alianza
en un amor profundo y tierno
fundiéndose como en la playa
la arena, el agua, el cielo.
Se unen en las miradas
renunciando al egoísmo pleno
entregando en el tú el alma
en la creación del Ser nuevo.
Al cielo se elevan las esperanzas
en la espera, la oración y el deseo
de abrazarlo fuerte con la mirada
y abrigarle cubriéndolo de besos.
Se entonan canciones de nanas
esperando el feliz encuentro
imaginando su perfil, su cara
¡¡abrazándolo con cariño tierno!!
Así se cumple la Palabra
anunciada desde tiempo eterno
el amor que en la entrega desata
la Promesa que llega del Cielo.
26 de mayo de 2014
A Juan e Isabel
A Mercedes y José Antonio
Por el futuro nacimiento de su hijo

José Antonio Bedmar Redondo

martes, 13 de mayo de 2014

ABRAZANDO TUS RECUERDOS (A DAVID)

Se despierta un recuerdo encendido
iluminando las imágenes que sueñan
abrazar tu dulce cuerpo dormido
al despertar el sol de la tierra.
Imagino que estaríamos unidos
hablando de cosas que se anhelan
descubriendo en el tiempo, fundidos
en la vida familiar terrena.
Quiso Dios abrir caminos
diferentes a los que uno sueña
mostrando su poder Puro y Divino
naciendo en este día de fiesta.
En Sus manos fuiste acogido
con la alegría de saber quién eras.
¡¡Gracias por haberte hecho amigo
mostrando la esperanza que perdiera!!
Seguro que estás bajo el cobijo
de la Virgen, de este día que nacieras
que te abraza y mima con cariño
¡¡y en la misericordia de Sus ojos crezcas!!
No es tristeza lo que afirmo
al sentir tú falta, que ya no llega,
es alabanza que con firmeza grito
en los recuerdos que aún me quedan.
 Hoy con estos versos te guiño
recordándote en la fecha propuesta
abrazándote con mensajes que escribo
abrazando con palabras la espera.
13 de mayo de 2014
Día de la Virgen de Fátima
A mi hijo David en el recuerdo.

José Antonio Bedmar Redondo

viernes, 9 de mayo de 2014

EL TESORO DE LA VIDA

Como el sueño del hombre indomable
que quiere ser señor de su mundo
y con sus manos realiza y deshace
desde lo más alto a lo profundo.
Buscamos la seguridad imparable
queriendo controlar el futuro,
atando cabos que se deshacen
por no poder formar nudos.
Bebemos constante, la vida del aire
sacando del tiempo etéreo, su jugo.
Almacenando objetos que valen
el importe de la nada, seguro.
Programamos la vida estable
con trabajo y dinero de humo
que se esfuman y se contraen
sin dejar a su paso rastro alguno
ante problemas y hechos que nacen
rompiendo la seguridad ¡¡inoportunos!!
quemando los sueños que arden
con lágrimas que añoran el consumo.
Sólo Dios está siempre al rescate
al paso de los años del mundo
que creó por Amor inmutable
el tiempo que nos da el fruto.
Él gobierna con poder el Hades
¡¡ los Avernos más profundos!!
Y engrandece a quien le satisface
en su obrar humilde y fecundo.
No se pueden fraguar los planes
¡¡como aquel mayoral iracundo!!
que almacenó grano en centenares
y perdió la vida en un segundo.
Sólo la providencia de Dios nos vale
¡¡más que el tesoro valioso y oculto!!
el único que no cambia sus planes
de su Amor inmenso y Puro.
9 de mayo de 2014

José Antonio Bedmar Redondo

domingo, 4 de mayo de 2014

RENACER DEL ALMA


¿Cómo puedo nacer del agua?
¿Cómo puedo nacer del fuego?
¿Cómo puedo nacer con savia?
¿Cómo puedo nacer de nuevo?
Pregunta el necio por la gracia
como se puede nacer del seno
sin comprender en su ignorancia
que el Nuevo Nacer no es terreno.
Se nace cuando se ama
perdonando en el destierro.
Se nace cuando se ata
el odio y la mentira desde el cielo.
Se nace si se proclama
con la vida, dando ejemplo,
¡¡olvidando esquemas que matan
arraigados en el hombre viejo!!
Se nace entregando el alma
cada día, en cada verso
escrito siempre en la mirada
de ese amor que cubre de besos.
Se nace, cuidando a quien clama
dolorido por los golpes del viento
llorando y pidiendo venganza
por no saber vencer al miedo.
Se nace en sentimiento y calma
en el profundo hacer, con celo,
con la inocencia pura de la mirada
que provoca Nacer del Cielo.

4 de mayo de 2014

José Antonio Bedmar Redondo