Hoy levanto la mirada hacia el cielo
aunque las nubes me tapen las miradas
porque sé que detrás se esconde lo bello
¡¡el amanecer prometido del alma!!
Y pienso en todo lo que tengo
en regalos que la Providencia haya
¡¡ Abrazos y risas que aportan consuelo
entregados siempre en tiernas palabras!!
Hoy, sin miedo, quiero levantar el vuelo
y proclamar que la tristeza se acaba
que Dios, por vosotros, está en medio
de la desidia que se aloja en el alma.
Y quiero ser agradecido, y puedo,
al sentir el abrazo de las nubes bajas
que más allá del triste suelo
se recetan abrazos que nunca acaban.
Cultivar ser siempre agradecido
¡¡Con lo que tengo me basta!!
que lo importante no es caerse en el camino
sino agarrarte a la mano que te levanta.
Y en el Corazón de Madre compartimos
el no entender que, a
veces, pasa
el llanto, la pena, el olvido
¡¡todo en su Corazón se calma!!
Y en la Promesa que nos entrega Jesucristo
con el Pan y el Cáliz de la Alianza,
se responde sin tregua ni olvido
¡¡que el Amor de Dios nos basta.!!
No puedo sin más ser agradecido
¡¡porque así me lo pide el alma!!
Cerrar los ojos y ver los sitios
donde crece ese Amor que todo allana.
Hoy, y para siempre designo,
que ese Amor que nos acompaña,
abrirá con cariño futuros distintos
y allanarán siempre las calzadas
se abrirán hacía el cielo divino
en nuevos amaneceres de miradas,
juntándose en el
deseo tan pedido
en la Comunión tan esperada.
Y de la mano de familiares y amigos
caminareis renovando la alianza
sin olvidar siempre, ser agradecidos
cantando “Buenos días por la mañana”
A mi clase
de 4º EP. A pesar de esta pandemia, seguís siendo una Luz en los corazones de
los que os rodean.
10 de mayo
de 2020 José Antonio
Bedmar Redondo