Se enamora
el sol en la mañana
despertando
con tenue luz las cumbres
que esperan
ansiosas las miradas
¡¡quitando
las sombras que las cubre!!
Se enamora
también la playa
en su vaivén
eterno que nutre
en cada
movimiento, el agua,
¡¡que en la
arena la orilla la oculte!!
Son testigos
el cielo, el sol y el mar
que en un
ciclo continuo las une
¡¡respetando
los tiempos de gloria
aceptando
oscuridades que bullen!!
Y toda la
creación de Dios reclama
ese detalle
que hace que todo perdure
¡¡la entrega
en el Amor que allana
los caminos
a los que todos conducen!!
Así es la
entrega que se proclama
en el
Sacramento verdadero que nos nutre
¡¡Unas veces
el sol en la mañana,
otras,
simplemente cumbres!!
6 de agosto de 2016
A Enrique y Loreto por su próximo enlace.(27/08/16)
Con mucho cariño
José Antonio
Bedmar Redondo
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